Chipirones al ajillo
Tabla de contenidos de esta receta [ver]
Hoy vamos a cocinar Chipirones al ajillo, una receta muy fácil, que no te quitará mucho tiempo en la cocina.
¿Sabías que los chipirones son los calamares pero cuando aún son jóvenes? Pues sí, cuando alcanzan un tamaño, cambian su nombre por el de calamar que es el más común y el nombre que más suena en medio mundo.
Suelen vivir en bancos junto con otros chipirones, no es un cefalópodo que le gusten las profundidades, es más, suele vivir muy cerca de la superficie marina.
Su pesca suele hacerse durante todo el año, aunque es en los meses de verano cuando más especies de chipirones diferentes se pueden capturar.
¿Qué nos aportan los chipirones? Es un pescado con un alto contenido en proteínas de buena calidad, lo que nos da todos los aminoácidos esenciales. Es un alimento muy bajo en grasas y calorías, lo que hace de él que aparezca en muchas dietas de adelgazamiento.
Dentro de las recetas de pescado que puedes encontrar en el blog déjame que te recomiende otro que es también muy sencillo y que nos aporta muchas vitaminas, como son las sardinas (ver receta aquí), además en esta receta de sardinas que te digo hay un truco para cocinarlas en casa sin humos ni olores.
Si eres amante de los chipirones, aquí te voy a proponer otra manera de cocinarlos, ya que es un pescado muy versátil en la cocina chipirones en salsa guisados ( ver receta aquí).
¿Te animas a probar estos chipirones al ajillo?
¡Vamos a la cocina!
Ingredientes para Chipirones al ajillo
Para 4 personas
- 16 Chipirones
- 3 Dientes de Ajo
- Perejil Fresco
- Zumo de Medio Limón
- Aceite de Oliva Virgen Extra
- Sal
La preparación de los chipirones al ajillo es muy sencilla, tan sencilla que el tiempo que te va a quitar en la cocina es mínimo. Así que, aparte de comer sano y rico, vas a disponer de tiempo para ti y tú familia.
Como limpiar los chipirones
Lo primero que vamos a hacer para la realización de esta receta es limpiar el chipirón, si tienes la suerte de que te lo haga tú pescadero, este paso te lo puedes ahorrar, si no, te cuento como hacerlo.
El chipirón se divide en dos partes, el cuerpo y los tentáculos, sujeta con fuerza la primera para retirar los tentáculos del mismo y reserva estos. Centrémonos en la parte del cuerpo, ahí tenéis dos opciones, quitar o no quitar la piel, eso es a vuestra elección, yo la quitaría, es solo por estética porque no es nada malo cocinarla, es más, aporta hasta sabor.
Una vez limpia la piel o no, vamos a retirar la espina central (pluma) y el interior de la bolsa, dependiendo de lo que haya comido el chipirón, estará más llena o menos, límpiala bien por el grifo y frota a conciencia.
La zona de los tentáculos, la vamos a limpiar bien debajo del grifo y le vamos a quitar la parte de la boca, deséchala y guárdate el resto.
Cómo hacer la receta de los chipirones al ajillo
Para hacer los chipirones al ajillo, ponemos la sartén al fuego a temperatura máxima y echamos en ella los chipirones, pasados pocos segundos, el chipirón empezará a soltar el agua que contiene, una vez que la haya soltado vamos a dejar que evapore. Cuando se haya evaporado, retiramos la sartén del fuego para hacer la salsa.
Para ello, en un mortero, echamos los dientes de ajo ya pelados junto con el perejil en trocitos muy pequeñitos y sin nada de tallo, solo hoja y lo machacamos a conciencia. Agregamos el zumo de medio limón y un chorrito de aceite. Removemos todo bien y reservamos.
Volvemos a poner la sartén de nuevo al fuego y echamos unas gotitas de aceite. Cuando empiece a freír el chipirón, incorporamos la mezcla que tenemos en el mortero, removemos un par de minutos como mucho y retiramos, en este punto probamos de sal y si hiciera falta, se ponéis un poco, servimos de inmediato junto con una ensaladita como esta.
Consejos para hacer los chipirones al ajillo
El chipirón a la plancha no ha de freírse mucho, si no se quedará durísimo. Otra cosa sería hacerlo cocido, pero hay que vigilar el tiempo en la plancha.
Debido a todas las vitaminas y proteínas que nos aporta, deberíamos comerlos al menos, una vez al mes e intercambiarlos con más pescados blancos, ya que son ligeros para hacer la digestión, por los que os aconsejo que mejor que para comer, los hagáis para cenar.
No echéis la sal hasta el final, os puede quedar salado. Si lo hacéis antes, una vez que hayáis echado el majado del ajo, ahí, probad y rectificar si hiciera falta.
¿Te has quedado con ganas de más recetas de pescado? Prueba estos boquerones al limón, o estos en vinagre ¡Te encantará!
Escrita por: María Jesús
Publicada el 19 junio 2017